Con los primeros brotes de las hojas del roble, que parecen ruborizadas, las flores comienzan a nacer a pesar de la lluvia, pero gracias a ella, esta primavera va a ser muy, pero que muy bonita.
Las hojas del roble nacen enrolladas sobre sí mismas y de un color rojizo, se van
abriendo lentamente hasta desplegarse totalmente y tomar su color verde característico.
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