Gracias a Marga y Juan, conocimos a varios vecinos de Cuacos. Uno de ellos dispone de unos cuantos cerezos en sus tierras y pudimos disfrutar de sus frutos cogiéndolos directamente del árbol. Confío en que las dulces calorías ingeridas las haya quemado antes al reecogerlas, jajajaja.
Gracias a Marga y Juan, conocimos a varios vecinos de Cuacos.
ResponderEliminarUno de ellos dispone de unos cuantos cerezos en sus tierras y pudimos disfrutar de sus frutos cogiéndolos directamente del árbol.
Confío en que las dulces calorías ingeridas las haya quemado antes al reecogerlas, jajajaja.